CC.OO. denuncia la situación feudal a la que están sometidos los trabajadores de J. García Carrión

Jueves, 7 de junio de 2007
www.daimiel.org. - La Federación Agroalimentaria de CC.OO. de Castilla-La Mancha denuncia públicamente la situación en la que se encuentran los trabajadores de la empresa J. García Carrión (zumos y vinos Don Simón) en su factoría de Daimiel (Ciudad Real): tienen un convenio colectivo de empresa que sólo se puede calificar como feudal, muy por debajo en salarios y en derechos del convenio del sector, mientras que su jornada laboral anual mínima es muy superior (1.826 horas, frente a una media de sector de 1.792)

Además, la jornada diaria de 9 horas puede ampliarse –de forma obligatoria- hasta las doce horas diarias mediante tres horas ‘complementarias’ para “trabajos de puesta a punto”, con lo cual las horas de trabajo anuales exceden incluso lo fijado en su convenio. Y los trabajadores ni siquiera conocen los turnos que tendrán que realizar más que con unos pocos días de antelación (se comunican semanalmente, los viernes).

Se paga un plus por cantidad de trabajo para aquellos trabajadores que hagan trabajos fuera de la jornada ordinaria, se hacen horas extras compensadas obligatorias, el convenio colectivo no tiene tablas salariales. Frente a lo estipulado en el Estatuto de los Trabajadores, las fechas del disfrute de las vacaciones son fijadas unilateralmente por la Dirección de la empresa,

En cuanto al empleo, conviven en la misma factoría, independientemente de la plantilla de la empresa, cuatro empresas de trabajo temporal: Flexiplan, Elen, Vendior y Laborman.

La estabilidad en el empleo es nula; buena parte de los trabajadores y trabajadoras carecen de carné de manipulador: utilizan máquinas (paletizadoras, etiquetadoras, llenadoras, etc.) sin formación ni experiencia ninguna, lo cual ocasiona multitud de averías; y -lo que es más grave, por los riesgos que conlleva para la salud y la seguridad- manipulan las carretillas de cargas sin protección y sin experiencia en su manejo, al haber una rotación permanente de trabajadores por estos puestos de trabajo.

Los equipos de protección individual son mínimos y existen importantes riesgos de electrificación al haber zonas de humedad y encharcamientos en los mismos pasillos en donde se encuentran los mandos eléctricos.

Para CC.OO., la situación en la factoría de García Carrión en Daimiel es muy grave, tanto por la inestabilidad laboral, los posibles fraudes en la contratación, las situaciones de riesgo para la salud y la seguridad, los excesos de jornadas, la discrecionalidad total de la dirección para imponer turnos, jornadas y vacaciones, los bajos salarios y la reducción a la mínima expresión, cuando no completa anulación, de los derechos de los trabajadores.

CC.OO. denunciará ante la Inspección de Trabajo estas irregularidades para que actúe a la mayor urgencia posible y acabe con la situación que están padeciendo los trabajadores de la empresa J. García Carrión.