Daniel Martínez: “Se trata de una
iniciativa pensada, una vez más, para adecuar el régimen electoral al partido
que gobierna y no al servicio de la democracia”
Toledo, 17 de mayo de 2012. Izquierda
Unida de Castilla-La Mancha ha querido valorar la aprobación de forma
unilateral por el Partido Popular, como ya ocurrió con el PSOE cuando gobernaba
en el año 2007, de lo que ellos mismo denominan adecuación de la Ley Electoral
de Castilla-La Mancha. En realidad se trata de un retoque en el número de escaños
a elegir, más que de una reforma electoral y representa una enorme
contradicción de la Presidenta Cospedal que defendía una cosa en la oposición y
ahora que gobierna se olvida y hace precisamente lo que criticaba de
otros. Se trata de aumentar un escaño
más a Cuenca, Guadalajara, Toledo y Ciudad Real, dejando fuera a la provincia
de Albacete de ese aumento por segunda vez consecutiva; todas las provincias
han aumentado el número de escaños a elegir en los últimos años menos la de
Albacete, es decir “adecuar” el número de escaños al nuevo escenario político.
Según Daniel Martínez, Coordinador regional de IU,
“los nuevos cambios en la ley electoral responden a la necesidades propias del
partido en el gobierno, no solucionan los problemas de déficit electoral,
representatividad y pluralismo político existentes en Castilla-La Mancha,
y además suponen desperdiciar nuevamente
una buena oportunidad para abordar un verdadero paquete de reformas que
propicien una regeneración democrática cada vez más necesaria y urgente”.
Para Martínez, “la opción elegida condena a una
degradación mayor, si cabe, a las Cortes regionales, únicas bipartidistas en
toda España, y en su conjunto a la calidad democrática de una sociedad que
demanda más participación y responsabilidad en la gestión de las instituciones
públicas”. “Tanto en la forma como en el fondo, en esta propuesta, el PP coincide con el PSOE en su modificación
electoral del año 2007, de lo que cabe concluir que el bipartidismo en el poder
se mueve más por intereses espurios que por valores democráticos y de justicia,
electoral en este caso”, añadió el Coordinador regional de IU.
Para Izquierda Unida una verdadera reforma del sistema
electoral no debe sustentarse en motivaciones partidistas, ni obedecer a
cálculos electorales, ya que lo que está en juego es la calidad
democrática de una región y la salud democrática de de unas Cortes que no
representan la pluralidad política y social existente. La calidad de una
democracia se mide, en primer lugar, por la capacidad del sistema electoral
para generar adecuadamente la representación política de la sociedad; sin un
sistema electoral justo, igual, proporcional y neutral no se puede alcanzar un
estado democrático y de derecho óptimo. Además, del sistema electoral depende,
en buena parte, la configuración de los parlamentos, la elección de los
gobiernos y, en definitiva, las políticas que aplican en cada legislatura. Las
políticas de recortes, privatizaciones y desmantelamiento de los servicios
públicos, sacrificar el Estado social en favor de los mercados y el pago de la
deuda, entre otras, las aplica hoy en Castilla-La Mancha un gobierno que ha
sido elegido a través de unas normas electorales injustas.
Por
todo ello y dadas las carencias que mantiene la regulación, la propuesta de
Izquierda Unida de Castilla-La Mancha, entregada la pasada semana a los grupos
de las Cortes de PP y PSOE, se
concreta en los siguientes puntos:
1º.- Creación
de una Mesa para la Reforma Electoral y la Regeneración Democrática en
Castilla-La Mancha, en la que además de los actuales Grupos Parlamentarios,
participen los grupos políticos de implantación regional que tengan Grupo
Parlamentario en las Cortes Generales. Se invitará a los trabajos de dicha Mesa
a las organizaciones sociales y ciudadanas más representativas de Castilla-La
Mancha.
2º.-
En cuanto al Régimen Electoral regional, debe contener en todo caso (no ocurre
con ninguna de las propuestas realizadas por los partidos con representación en
las Cortes) los siguientes criterios básicos:
a) Situar el nivel de
representatividad política de nuestra región en la medida de las demás CCAA de
condiciones similares.
b) El sistema electoral
debe tender a reflejar sin limitaciones injustas los principios de
proporcionalidad, representatividad, igualdad y pluralidad política.
c) Recoger un sistema de
asignación de escaños a cada provincia objetivo, flexible y duradero que dote
de estabilidad democrática a la Ley Electoral regional. El mismo debe recoger
un sistema de actualización automática de escaños según la evolución de la
población.
Teniendo en cuenta estas
tres premisas, aportamos por las siguientes opciones:
A)
CON MODIFICACIÓN DEL ESTATUTO DE AUTONOMÍA:
-Circunscripción única y
reparto proporcional de los diputados/as, según los votos obtenidos.
- Modificar el número
mínimo y máximo de escaños a elegir.
B)
SIN MODIFICACIÓN DEL ESTATUTO DE AUTONOMÍA:
Elección de 59
diputados/as, asignando 5 por provincia y 34 mediante la aplicación de una
fórmula sencilla basada en el reparto proporcional en cada una de las
provincias según su número de habitantes.
Esta segunda opción solo
podría ser transitoria a la espera de las modificaciones estructurales
propuestas y en consideración a la voluntad de la mayoría parlamentaria actual.
No hay comentarios:
Publicar un comentario