Ecologistas en Acción advierte, coincidiendo con el primer aniversario del dramático y lamentable incendio forestal de Guadalajara, que no se han adoptado las medidas adecuadas para reducir el número de grandes incendios forestales en España. Es prácticamente imposible controlar determinados factores de riesgo de incendios, en particular, el estructural -orografía del terreno-, el riesgo meteorológico, derivado de las condiciones meteorológicas existentes como son la humedad, la temperatura y el viento, principalmente, así como el riesgo de estrés hídrico, condicionado en gran medida por la propia evolución de las condiciones meteorológicas.
Sin embargo, sí se puede actuar para reducir el número de incendios, que no deja de aumentar peligrosamente en los últimos años. Para lograrlo, se debe trabajar intensamente, y desde distintos ámbitos -administrativo, normativo, sensibilización y seguridad-, desde las Administraciones públicas.
El incendio forestal que conmocionó a España el verano pasado, se podría haber evitado, y con ello, la muerte de 11 profesionales en extinción de incendios forestales. Una barbacoa, una actividad lúdica al aire libre, en época de máximo riesgo de incendio forestal, provocó uno de los incendios forestales más dolorosos y trágicos que se recuerda.
Como consecuencia del impacto social de la tragedia y del alcance del suceso, el Ministerio de Medio Ambiente aprobó por vía de urgencia un Real Decreto que establecía una serie de prohibiciones y limitaciones de obligado cumplimiento en el conjunto del Estado español. Se prohibió encender fuego en las áreas de descanso de la red de carreteras, en las áreas recreativas y de acampada, e incluso, la circulación de vehículos a motor por las pistas forestales, en las que no existiera servidumbre de paso, Su aplicación, supuso una reducción drástica del número de incidentes.
Este año, han sido las CCAA las que se han responsabilizado de establecer la regulación o prohibición del uso del fuego en los terrenos forestales o montes. La nota característica, ha sido la disparidad de criterio, entre las Comunidades Autónomas. Ese contraste responde al criterio de territorialidad y oportunidad política, dejando, amenazadoramente, los criterios técnicos para mejor ocasión.
Aunque resulta difícil de creer, hasta 6 Comunidades Autónomas, permiten el uso de fuego, incluso en época de máximo peligro de incendio forestal, en las áreas recreativas, de acampada y de descanso. Esas Comunidades Autónomas son: La Rioja, Cantabria, Asturias, Galicia, Canarias y la Comunidad de Valencia. Algunas de las CCAA mencionadas, encabezan, año tras año, las estadísticas de número de incendios y de superficie forestal afectada en relación a su superficie.
Hay otras CCAA que han optado por prohibir o limitar este tipo de usos del fuego en el medio natural, como Aragón, Andalucía, Castilla-La Mancha, Murcia y Cataluña.
Ecologistas en Acción considera grave que muchos responsables sigan anteponiendo la rentabilidad política a la seguridad de los ciudadanos y la conservación del medio natural. En ocasiones tomar medidas prohibitivas no resulta rentable políticamente y, por ello, se eluden, aún a riesgo de que sucedan hechos tan lamentables como los de Guadalajara de hace un año.
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