15 de diciembre de 2013

El Partido de la Izquierda Europea (PIE) apuesta por hacer frente de forma radical a la austeridad que impone la Troika y por la defensa de los servicios públicos

En la jornada de clausura de hoy domingo los cerca de 300 delegados asistentes al IV Congreso han aprobado por abrumadora mayoría el 'Documento Político' y la 'Plataforma Programática' que se han debatido

Pierre Laurent, reelegido presidente del PIE en la votación en la que se ha renovado también a su dirección, mientras el líder de la formación griega Syriza, Alexis Tsipras, ha sido designado como su candidato a la presidencia de la Comisión Europea


El Partido de la Izquierda Europea (PIE) apuesta por hacer frente de forma radical y explícita a la austeridad impuesta por la troika, que se estudie cómo hacer frente de forma crítica y aponerse al pago de la parte “ilegítima” de la deuda contraída por los Estados con las entidades bancarias especuladoras, garantizar los servicios públicos y rechazar con firmeza la aprobación del Tratado de Libre Comercio con EE.UU.

Estas propuestas, planteadas para ser incorporadas por las 26 formaciones que integran el PIE en sus programas electorales de cara a las Elecciones Europeas de mayo de 2014, han sido incluidas en los documentos que cerca de 300 delegado/as han debatido desde el pasado viernes y hasta la clausura de hoy en el IV Congreso que esta fuerza pluriestatal ha desarrollado en Madrid. Las fuerzas políticas que integran el PIE cuentan con 27 eurodiputados integrados en el Grupo Parlamentario de la Izquierda Unitaria Europea / Izquierda Verde Nórdica (GUE/NGL) de un total de 754 y las previsiones es dar un salto cuantitativo en los comicios del próximo año.

Entre los trabajos que han sido objeto de análisis y deliberación están el ‘Documento Político’ del Congreso y la ‘Plataforma Programática’ que presenta la formación de cara a los comicios al Parlamento Europeo. El primero ha sido aprobado por un 93% de los delegados, mientras que el segundo ha contado con el apoyo del 86,4%.

Además, en esta sesión de clausura se ha procedido a la renovación de la dirección del PIE. Pierre Laurent ha sido reelegido para un nuevo mandato de tres años con un respaldo del 76% de los representantes de las formaciones integrantes de este partido presentes en el Congreso. También han sido reelegidos Maite Mola (Izquierda Unida) y Alexis Tsipras como vicepresidentes.

En el caso del líder de la formación griega Syriza, el Congreso del Partido de la Izquierda Europea ha designado a Tsipras como su candidato a la presidencia de la Comisión Europea para la elección que debe tener lugar en 2014.

En su intervención ante el Plenario, Alexis Tsipras, que dirige la segunda fuerza política de Grecia, instó a sus compañero/as del resto de formaciones internacionales de la izquierda alternativa a no “desaprovechar la oportunidad” que van a suponer las elecciones del próximo año para acabar con las recetas neoliberales impuestas desde la cúpula de la UE, el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) y que tanto daño provocan tanto en su país como en la mayoría de Estados de la Unión Europea (UE).

En los documentos aprobados el PIE expone distintas medidas para hacer frente a la grave crisis económica desde una óptica social y de izquierdas, y fija como prioridad la creación de empleo además de la búsqueda de un desarrollo económico “social, ecológico y solidario”.

Este nuevo modelo de crecimiento económico debe pasar por “abandonar los planes de austeridad” para evitar una “catástrofe humanitaria” y reformar la política agrícola común para garantizar la “soberanía alimentaria”.

Junto al rechazo al futuro Tratado de Libre Comercio UE-Estados Unidos, la Izquierda Europea propone la suspensión del acuerdo de la Unión Europea con Israel mientras las autoridades de este Estado sigan “violando” los derechos humanos, además de la eliminación de las bases militares extranjeras en territorio de la UE.

En el ‘Documento Político’ destacan las propuestas sobre la “emancipación” de los mercados financieros para situar la economía al servicio de las personas. El trabajo deja claro que el PIE no está a favor de abandonar el euro, dado que no conduce “automáticamente” a políticas más progresistas.

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