
Martínez considera que la sanidad pública es algo que "estorba" al Partido Popular y por ello, la gestión que está realizando tanto en el conjunto del Estado como en Castilla-La Mancha, no tiene como objetivo la protección de la salud de sus habitantes sino que lo que busca es privatizarla, "para que algunos o algunas empresas hagan negocio con este derecho fundamental".
Para el Coordinador Regional de IU, los recortes que se están produciendo sistemáticamente desde 2011, están poniendo en peligro la calidad de los servicios que se venían prestando, en incluso "se está poniendo en peligro la propia viabilidad del servicio público en su conjunto", una situación que, según Martínez, se está demostrando ya con la experiencia en otros países y en nuestro país ha sido el propio Tribunal de Cuentas, en un informe reciente, el que señalaba que los servicios públicos privatizados cuestan más que si los presta directamente la administración.
Para Martínez, la política sanitaria del PP, es "excluyente", "deja fuera de cobertura y asistencia a miles de ciudadanos" y establece copagos que "limitan o ponen barreras" al acceso a esa asistencia sanitaria.
En este punto y en relación al anuncio de la Presidenta de no aplicar el copago hospitalario, Martinez ha calificado esta medida como "un gesto electoral" al considerar que si de verdad Cospedal no quiere que se pague este servicio que no ponga esta medida en la ley, "lo que no puede ser es que se recoja en la ley y después se asuma por la Junta, con esta decisión, nosotros estamos convencidos de que tarde o temprano, los ciudadanos acabarán pagando" afirma.
Martínez ha hecho recuento de los principales recortes que ha aplicado el Gobierno Regional desde que llegó al poder en el año 2011, recortes que ha calificado de "indiscriminados, injustos e innecesarios" y que están pasando por cierres de quirófanos, de plantas en Hospitales, eliminación de camas, privatizaciones, supresión de consultas, reducción de plantillas, despidos de interinos, etcétera, así como de las negativas consecuencias que para los ciudadanos están suponiendo, colapsos en urgencias, aumentos de las listas de espera, retrasos en la atención, traslados a otras localidades para realización de pruebas.
En definitiva para el máximo responsable de Izquierda Unida en la región, Echániz y Cospedal están consiguiendo que en Castilla-La Mancha, la sanidad ni sea pública, ni universal, ni gratuita.
Fuente: www.dclm.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario