El poder de la gente

por Silvino Redondo, afiliado a la asamblea de IU en Ciudad Real 
En el momento de la transición política, allá por la segunda mitad de los 70, pudo ser una sensata decisión no permitir que demasiados partidos políticos ocupasen los escaños del Congreso; se necesitaba disponer de estabilidad política en los titubeantes inicios del nuevo sistema y tal vez por falta de hábito, aquellas mentes (ciudadanía incluida) no estuviesen preparadas para tolerar el debate político. Hoy lo que se echa en falta en el Congreso es precisamente eso: debate. Los partidos favorecidos por el bipartidismo que predispone la ley electoral, se encuentran muy cómodos pudiendo hacer y deshacer pasando ese rodillo cuyo uso se turnan. Tan cómodos que pueden sin vergüenza alguna predicar en las campañas electorales cosas siempre deseables por la ciudadanía, y después realizar lo que favorece a los poderes económicos, perjudicando las condiciones de vida de la mayoría. Lo llevan haciendo más de treinta años y no queremos darnos cuenta.
Esta extendida actitud de desinterés por la política, es la que ha permitido los graves perjuicios que PSOE-PP ha ocasionado a la sociedad. Al parecer desconocemos el proverbio árabe “La primera vez que me engañes, será culpa tuya; la segunda vez, la culpa será mía”
La mayoría de las medidas con que nos han perjudicado los gobiernos alternos del PSOE y del PP, no se gestaron en este país, fueron dictadas por la oligarquía dominante en Europa. Estas directrices ocultas se convierten en política económica en los distintos estados, en el momento forma e intensidad que sus ciudadanos puedan tragar.
La importancia y el número de las pérdidas sociales impuestas hasta hoy por el contubernio PPSOE, está haciendo despertar del dulce sueño de la “sociedad del bienestar” a muchos ciudadanos. ¿Estamos de enhorabuena?: a medias, son aún pocos los que se dan cuenta que la política, queramos o no, entra en nuestras vidas y que por tanto no nos queda otra que participar en ella en la medida de nuestras posibilidades. Desafectarse de la política es un error muy grave. Enmendar los errores cometidos por la ciudadanía en los años pasados, es más que un acierto, una necesidad ya imperiosa.
¿Por qué entonces esa impasividad frente a los graves pérdidas sociales que afectan y afectarán nuestra vida y la de nuestros hijos?, porque la mayoría de las personas se sienten impotentes y desprotegidos ante el Poder; por eso no se puede luchar solo, por eso hay que sumarse al grupo cuya fuerza crece con su número.
¿Por qué se elige recurrentemente esta nociva opción de gobierno PPSOE?, porque todo cambio comporta incertidumbres que a muchos da miedo. El refrán de “más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer” refleja esta actitud temerosa. El miedo paraliza la mente y la voluntad, por eso el Poder lo induce; por eso es la juventud el motor de los cambios, porque ellos no tienen miedo.
Porque en el Parlamento Europeo se deciden políticas que nos afectan, es necesario votar en 25 de mayo. Es más importante que cualquier otra cosa que ese día puedas hacer. Tu voto no vale casi nada, pero sumado a millones, es el poder de la gente.
Porque el PPSOE lleva décadas perjudicando gravemente a nuestra sociedad, y si vuelven a ganar confirmarán que aún estamos dispuestos a tragar mucho más, hay que votar en su contra, y la abstención no lo castiga, lo beneficia. Por eso no atiendas al “todos son iguales”, recuerda que las consignas las promueven quienes se benefician de ellas.
Porque hay que trasformar la Europa regida solo por intereses económicos en una Europa social que impulse los valores morales y sociales que favorecen a todos, es preciso votar a los que crean en estos cambios.
Porque el valor de tu voto se multiplica por los que convenzas de la necesidad de votar el 25 de mayo, haz campaña a favor de estas elecciones europeas.Antes de decidir tu voto, evalúa los programas de los partidos y sobre todo su credibilidad. No olvides el proverbio árabe.

http://www.izquierda-unida.es/programa_europeas2014


Fuente:   www.elcrisoldeciudadreal.es