Pese al rechazo casi completo del arco parlamentario, el PP hace valer su mayoría tumbando cuatro enmiendas a la totalidad.
Fuente: ecodestinos
Duro estreno de la nueva ministra de Medio Ambiente, Isabel García
Tejerina. No por la victoria, garantizada por la mayoría parlamentaria
de su partido, sino porque ha encontrado la oposición de casi todos los
grupos. La ley heredada de Arias Cañete tiene de todo menos consenso,
sin embargo el reparto de fuerzas ha tumbado las cuatro enmiendas a la
totalidad presentadas por BNG, Izquierda Plural, PSOE y CIU. No sólo los
partidos se oponen. El Consejo de Estado ha devuelto el proyecto
recomendando que se reconsidere la totalidad del texto; en diciembre de
2013 ya advirtió problemas de inconstitucionalidad. El tema de
competencia entre Estado y Comunidades Autónomas ha sido efectivamente
uno de los puntos que la oposición afea a la ley, especialmente las
formaciones nacionalistas.
Críticas a la “privatización” del uso público
Según ha defendido la ministra, la gestión de los parques nacionales
“debe ser más participativa y más abierta a las poblaciones del entorno.
Es necesario que estas poblaciones se impliquen en las oportunidades
que generan especialmente las que se refieren a las visitas y al uso
público”. Este es otro de los puntos que ha causado especial rechazo
porque, según el portavoz del PSOE, José Luis Ábalos, provoca “la
mercantilización” de los parques nacionales, degradando su principal
misión, es decir, ser una figura para la conservación. Todos los grupos
coinciden en que la ley no ha reunido el consenso debido, algo que si
sucedió con la anterior, la de 2007, ni ha pasado la aprobación del
Consejo de Estado. En consecuencua, advierten, sufrirá el rechazo del
Tribunal Constitucional por eliminar competencias de las comunidades
autónomas.
Las críticas más duras han venido al calificar la ley como
instrumento para ejecutar una posición ideológica que prima lo intereses
privados sobre la conservación del parque. Así, se especifica que
actividades como la caza, la navegación, las empresas de construcción o
el vuelo vean una puerta abierta para entrar en el uso público de los
parques nacionales. Según el portavoz del PNV, es raro que se haga una
ley nueva cuando la anterior era ya una buena herramienta de
conservación. “¿Qué quedaba sin proteger que esta ley proteja más?”, se
preguntaba el diputado vasco. La respuesta puede estar en la
intervención de la portavoz del Partido Popular: “Los 10 millones de
visitantes que tienen los parques nacionales suponen una oportunidad”.
"Es como pagar para apuñalar al Guernika, que el Palacio Real se pudiera
alquilar para bodas, bautizos o comuniones o que la Giralda fuese
gestionada por una empresa de puenting" ha equiparado la portavoz de
ERC, Teresa, Jorda i Roura.
¿Cómo afecta a Las Tablas?
En cuanto a la centralización que supone esta ley, el Parque Nacional
de Las Tablas de Daimiel no se ve afectado puesto que sigue
dependiendo de Madrid al no pedirse la transferencia de las
competencias. Sin embargo, sí que se ve influido por esa supuesta
“privatización” a la que se alude desde la oposición. De hecho, en el
borrador del plan de gestión que regulará el uso público del parque se
abre la posibilidad a visitar nuevas zonas que antes no se visitaban e,
incluso, con transporte en barco. El consentimiento que la nueva ley da a
la navegación permitiría que se pudieran hacer visitas en barco
gestionadas por una empresa privada. Asimismo, la nueva construcción para la promoción turística
realizada en zona de uso público e inundable también estaría en
sintonía con los nuevos vientos que soplan en la gestión de los parques
nacionales.
Fuente: www.tablasdedaimiel.com
Nuevo centro de promoción turística en Las Tablas de Daimiel
No hay comentarios:
Publicar un comentario